He necesitado un tiempo tras volver del viaje a Tailandia, para asimilarlo todo, y es que un viaje así no te deja indiferente.

Tailandia es un país increíble de por sí, pero recorrerlo con todos mis compañeros y contigo, Monica, ha sido mágico. Gracias por llevarnos a conocer lugares y personas que han marcado esta aventura y sin los cuales este viaje no hubiera sido el mismo, como el hotelito encantador de la abuelita thai en Ayutthaya o las visitas a médicos sanadores como Toksen, capaz de removerte hasta el alma con el martillo.

Gracias por crear un espacio donde nada es previsible, donde las cosas suceden por si mismas, donde cada uno puede SER.

Sara (Valencia)