Una forma de viajar integral, sintiendo el país desde un punto de vista diferente, llevándote un trocito dentro para siempre y conociendo lugares y gentes impresionantes que de otro planteamiento de viaje no podría haber ocurrido. Gran sensibilidad a la hora de la elección de los ritmos a la hora de visitar los lugares y gran profesionalidad.
Me encanta y mantengo una sonrisa permanente. Muy recomendable repetir, aunque con la variada oferta de países parece difícil repetir el mismo.