Este es mi segundo viaje con Apasho, dos experiencias únicas y diferentes pero con un gran factor común: el humano. Desde el primer contacto se respira que más que una agencia, es un grupo de gente con ganas de ayudar a realizar tus sueños… ¡¡¡y qué sueños!!!

Desde aquí mando un afectuoso saludo a nuestra coordinadora Emma, una persona pragmàtica, resolutiva, atenta y muy cariñosa. Y agradecer también a este proyecto, que es Apasho yoga, por tantas satisfaciones que da a viajeros como yo, que buscan algo más que conocer un pais cuando viajan.

viaje Tíbet yoga
Kiko