Mi primer viaje a India y, ha sido mucho más que ver impresionantes monumentos, distintas ciudades con diferentes culturas, las miradas curiosas y profundas de sus gentes, su comida, el olor a curry, tomar chai… y todo esto, aderezado con practicar yoga de la mano de Mónica, una maravillosa persona además de muy buena profesora y perfecta coordinadora del viaje.
Tiene el «don» de hacer que todo fluya y vas viajando por India con la esterilla al hombro, haciendo yoga en sitios que ni te hubieses imaginado. Y empiezas a sentir… pero no sólo el calor asfixiante, las tripas que se dan vuelta… Sientes a India, sus gentes, tus compañeros de viaje, el universo, la energía.
Mucho más que un viaje, un viaje con «alma» 100% recomendable en todos los aspectos. Seguro que repito.
Muchas gracias, Mónica.
