¿Qué dicen de nosotras?
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Cuando vas a India sabes que va a ser un viaje (sobre todo interior) muy potente. Así que si decides ir acompañado necesitas, en mi opinión, la compañía más acorde posible con la filosofía de un viaje con yoga y las necesidades del país. Así es Apasho por mi experiencia anterior y así es Emma por mi experiencia de agosto de 2017. Cuando todo lo alineas en tu interior todo se alinea en el exterior así que el grupo fue la primera joya del viaje. Grupo que difícilmente se compenetra sin la pasión y el amor que Emma pone en la India y en su trabajo. Emma eres un ángel de Apasho capaz de hacer lo fácil difícil, lo feo precioso y lo triste consciente. Si hace esto con las dificultades del viaje imaginad que hace con los regalos que encontramos y/o ella crea … Un viaje tan duro como espectacular, tan exigente como inolvidable … un viaje que días después te va enseñando lo que el día a día no te dejaba asimilar. Y también en ese viaje te coge de la mano Emma recordándonos canciones, momentos, emociones … Gracias Apasho. Gracias infinitas pequeña gran Emma, mi nueva gran amiga para toda la vida Cuando a principios de año empecé a planear mi viaje de verano la cabeza me mandaba a África, pero un día por casualidad vi el viaje de India norte haciendo yoga y apareció una emoción que no desaparecía con el paso del tiempo. Con más corazón que cabeza, me planté en Barajas el 5 de agosto, sin expectativas y con más cosas que dejar que llevarme de la India. El grupo fue el primer regalo: su tolerancia, amabilidad y cariño hizo fácil el viaje, pero la estratega, coordinadora, amiga y cercana Emma nos allanó y acercó el país hasta llegar a verlo con su toda su magia y caos, un lugar desquiciante para los sentidos y sin embargo, necesario para vernos a nosotros mismos. Ella nos lo mostró a través de sus sentidos y su corazón. Gracias Emma, eres una de esas perlas que uno se va encontrando en la vida. Ya me he confesado con Mónica. Me pongo a escribir y me doy cuenta de lo difícil que me resulta explicar o resumir el viaje a Vietnam. Al contárselo a la gente me doy cuenta de quizás, más que lo que yo digo, se trata de ver a través de sus ojos el Vietnam que les atrae. O al menos, es lo que observo al hablar con mis amigos y contarles qué tal ese viaje que tanto me emocionado, en el que tanto me he reído, compartido y… ¡vivido! Los más aventureros se quedan con el viaje en moto, con esa libertad de sentir el aire y la lluvia en la cara mientras te llevan y te dejas llevar (¡y lo fácil que es con los buenos conductores que son!), con los deslizamientos por las dunas sobre una plancha metálica, descendiendo en quad o el no saber dónde vas a dormir cada día, reorganizar el viaje según las condiciones metereológicas con las distintas sorpresas y aventuras en cascadas, lagos, carreteras, bosques de bambú, con el comer en mercados locales… Otros se quedan con las imágenes que les describo de paisajes agrestes, de verdor, de pueblos pequeños por el camino, del contraste entre las ciudades caóticas como Ho Chi Minh City y sitios tan preciosos y especiales como Hoi An o Sapa, de los arrozales, de los bueyes por el camino, de los vietnamitas niños, adultos, ancianos… Están también los que me preguntan por ese café vietnamita rico, rico del que vengo enamorada, por los zumos de frutas que he probado, por el qué me parece esa agua de coco, el zumo de caña de azúcar, la phô bo (¡qué bien probarla!), los noodles, por la cena en Sapa que nos zampamos en casa de nuestra guía (esos rollitos vegetarianos, el tofu y… ¡¡¡ese happy water!!) Mis compañeras de yoga me preguntan por las clases y alucinan con la profesionalidad y seriedad con la que Mónica las impartía y también con su flexibilidad (es ying y yang), con su disponibilidad, con la de cosas distintas que practicamos y que nos enseñó (vinyasa, hatha yoga, yin yoga, meditaciones, pranayamas…) Todo eso y mucho más es Mónica como profe de yoga. Como coordinadora, lo puedo resumir diciendo que lo hizo todo facilísimo y muy fluido. Y resumir todo lo que nos pasó e hicimos en estas dos palabras ya lo dice todo, ¿verdad? Y yo me acuerdo de todo eso y de mucho más. De esas cervezas compartidas, de las risas, los abrazos, los easy riders (¡y pensar que en un primer momento dudé si apuntarme por los días de viaje en moto! ¡Qué gran acierto ir y disfrutarlos). De mis compañeros (hoy amigos) de viaje. De los viajes locos en la furgo. De la música que oíamos. De las hamacas en las que descansábamos por el camino. De las partidas de cartas. De las sesiones de fotos. De los baños en piscinas, lagos y cascadas. De los silencios. Del karaoke. De una puesta de sol especial viajando sobre la moto. De la sensación de disfrutar de todos y cada uno de los momentos. Muchas gracias Apasho yoga y compañeros de viaje por hacer de Vietnam un lugar tan especial. Cuando vi que tenía la posibilidad de viajar a un país como Vietnam y recorrerlo como lo hicimos, de la forma en la que lo hicimos, haciendo yoga en sitios brutales, recorriendo en moto medio Vietnam con los easy riders, visitando zonas rurales, etnias, playas, ciudades, paisajes de ensueño… No lo dude ni un segundo en apuntarme. ¡Todo! ¡Todo! ¡¡¡En un mismo viaje!!! Para volverse loco. Loco, pero de pasión, del disfrute y de gozar de algo más que unas vacaciones, una experiencia vital y fascinante. Gracias al yoga de Apasho yoga y a mi ángel de luz Mónica, el alma mater de Apasho, más que una amiga, más que una compañera, más que alguien a quien adoro y que quede entre nosotros, admiro y valoro casi con devoción absoluta. Esta mujer y su forma de entender la vida, de afrontarla, de hacerte sentirla y de hacer que cada día, cada momento, cada segundo, estés en el aquí y ahora. Ni un poco más allá ni un poco más aquí. Justo donde toca estar. Siempre haciéndote ver que el yoga va más allá de una asana y que el yoga es una forma de entender la vida y de filosofía de vida a seguir. Mi viaje a Vietnam, aparte de volver a hacer que me reencontrara con Mónica, hizo que me reencontrara conmigo mismo y con esa parte de mí que estaba desconectada y que tanto necesitaba para volver a estar donde nunca debí de haber dejado de estar. En el aquí y en el ahora donde todo, es perfecto y viajar con Apasho es lo más parecido a estar así las 24h del día. Mil gracias de nuevo por hacerme sentir así. GRACIAS GRACIAS! El viaje a Vietnam con Apasho Yoga es de aquellos viajes que dejan una huella en tu vida. Los lugares increíbles por su belleza, los vietnamitas un amor, la comida deliciosa y el café vietnamita fuera de serie. Y qué decir de la coordinadora e instructora de yoga Moni, extraordinaria, por sus clases de yoga y de relajamiento, por sus sugerencias de los lugares a visitar, por su reacción ante situaciones imprevistas y ante todo por su calidez y gran corazón. Yo no repito viajes pero en este caso, si lo haría. Soy mexicana y vivo en la bella y aglomerada Ciudad de México Sentada en el aeropuerto de camino al Caribe por «trabajo» (se que cuesta creerlo pero es así) y escuchando «Carreteras infinitas» de Sidoine, toca hacer el «recuento de los daños» de este maravilloso viaje por Vietnam, donde hemos recorrido más de 2000 km de sur a norte disfrutando de su maravillosa gastronomía, café y un grupo increíble. Mónica es como los buenos vinos, con el paso del tiempo y cada vez que vuelvo la experiencia es mejor y supera las expectativas que podía tener antes de empezar el viaje. Empecé este viaje por la aventura con los easy riders (5 días en moto recorriendo Vietnam). Sin embargo desde el minuto 1 que estábamos haciendo check-in en el vuelo de Madrid nos integramos de una manera muy especial y nos hicimos una «bolita» juntos a todos lados, viviendo experiencias maravillosas y aprendiendo todos de todos, disfrutando de este aprendizaje juntos. En un punto del viaje pasamos de ser 12 a ser 24, una mezcla de culturas interesante (vietnamitas, españoles y mexicanos), divertida y mágica permitiéndonos aprender todos de todo. Demostrándome que juntos puede parecer que se va lento, sin embargo se llega más lejos. La energía positiva e integradora del grupo consiguió envolverme de tal forma que cuando me di cuenta era hora de volver a casa y no sabía lo que había visto/visitado en este viaje. Menos mal que el teléfono me hacía un mapa con los lugares donde había estado. Sólo puedo decir Cảm ơn nhiều ( muchas gracias en vietnamita ) a este maravilloso grupo y a Mónica, que han hecho posible está aventura maravillosa y nos vemos el próximo año. «Es posible vivir felizmente en el aquí y ahora. Muchas condiciones de la felicidad están disponibles.» Thich Nhat Hanh Viajar a India con Apasho Yoga ha sido la combinación perfecta para que mi viaje fuera inolvidable. Desde que das el primer paso y decides hacer el viaje ya empieza la aventura; antes, durante y después. Tengo muchas vivencias bonitas en el corazón, pero lo mejor fue unir India con mi cumpleaños. Os puedo decir que soplar las velas estando en una terraza con vistas al Taj Mahal, iluminados por una Luna Súper Llena, una Tarta de Súper Chocolate, cervecitas, vuelo de cometas, “musiqueta” y muy buena compañía… eso fue hacer MAGIA y se hizo. ¡Gracias por hacerlo! La filosofía de Apasho hace que éste tipo de viaje sea diferente, conocer el corazón del país desde sus raíces, mezclarse con su vida, reír, observar… todo esto te hace enriquecer por dentro y por fuera. La India sin conocerla me apasionaba pero una vez la conoces te atrapa. Contar con Emma como Coordi es la pieza clave para que todo fluya fácilmente y con tan buena energía. Ella es pura pasión y eso es muy bueno como compañía en tu viaje. Vale la alegría hacer este viaje o cualquier otro destino con este GRAN equipo: Emma, Anaïs y Mónica. Gracias chicas, sin vosotras no hubiera sido lo mismo. A mis compañeros gracias también por formar parte de mis momentos en India. Sin duda SÍ, Hazlo !!!!!!!!!!!!! ¡Increíble! Esta podría ser la palabra para describir este viaje a India con Apasho. Una manera diferente de descubrir este inmenso país, no sólo en extensión sino por sus colores, olores, comida, gente, música… No dejar de admirar el Taj Mahal, pero tambien el Golden Temple, disfrutar de una sesión de yoga al aire libre en el Lodi Park o descubrir poco a poco el país viajando en tren, tuk tuk …. Dar las gracias a Emma, una fantástica coordinadora y profe de yoga por darnos todo su amor, optimismo, vitalidad y por supuesto ¡su sonrisa! A Anaïs y a Mónica, dos bellísimas personas: gracias por haber podido compartir esos ratos con vosotras. Y no sin olvidarme de mis compañeros, sin vosotros este viaje no habría sido igual, cada uno ha aportado su granito de arena para hacer que fuese un viaje inolvidable. Si os lo estáis pensando no dudeis más a India con Apasho es una muy buena decisión, ¡no os arrepentiréis! Ha sido un viaje muy especial en muchos sentidos y ello ha sido posible gracias, en gran parte, a Emma, hermosa por dentro y por fuera, con una sonrisa que desborda alegría y amor por la vida y siempre entregada a los demás. ¡Gracias Emma por todo el amor que nos has hecho llegar y las puertas que has abierto en nosotros a las infinitas oportunidades que nos brinda el universo! Me siento afortunada por haber compartido parte de mi camino contigo y el resto de compañeros de viaje, de todos ellos he aprendido algo. ¡Gracias, gracias y gracias! Ah ¿Y qué hay de India? Un país de contrastes, aromas, miradas penetrantes, colores, comunión entre humanos y animales, espiritualidad… No os lo perdáis, es un viaje que quedará grabado en vuestro corazón. Un besote, compis Sin lugar a dudas una experiencia increíble donde nos juntamos un grupo de 12 personas de las que cada uno aportó su granito de arena e hizo que la experiencia fuera más enriquecedora. A día de hoy, con la calma y mirando todo con perspectiva creo que la India es especial y sin ninguna duda el mejor viaje que he hecho nunca. Pero lo que realmente hace que esta vivencia sea tan especial sois vosotros chic@s… sin todos vosotros no hubiéramos conseguido esta comunión. La India es un país intenso donde nada pasa desapercibido y con una riqueza multicultural sin parangón, pero sin dudas lo que más me ha enriquecido es el haberos conocido. Un beso fuerte chicos se os echa de menos.Viaje a India (2017 y 2016) y Sri Lanka-Maldivas (2015)
Viaje a India (agosto 2017)
Viaje a Vietnam (julio 2017)
Viaje a Vietnam (2017) e India (marzo 2016)
Viaje a Vietnam (julio 2017)
Viaje a Vietnam (julio 2017) y Sri Lanka-Maldivas (agosto 2016)
Viaje India (abril 2017)
Viaje India (abril 2017)
Viaje India (abril 2017)
Viaje India (abril 2017)